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El Cristo de la Sangre y su Madre iluminan la noche del Miércoles Santo

El trono del Santísimo Cristo de la Sangre y Nuestra Señora del Mayor Dolor en su salida // CharryTV

La Hermandad del Silencio realiza su solemne Estación de Penitencia

El Cristo de la Sangre y su Madre han iluminado la noche del Miércoles Santo al realizar su solemne estación de penitencia, que se inició desde la Colegiata de Santa María de la Encarnación la Mayor, desde la Puerta del Obispo. De nuevo, a su paso, las luces del municipio se fueron apagando, por lo que la oscuridad volvió a marcar esta procesión.

El silencio se rompió con el rezo melódico a cargo de la escola gregoriana Grupo Fernando de las Infantas, procedente de Córdoba. El trono de la Hermandad Sacramental del Santísimo Cristo de la Sangre y Nuestra Señora del Mayor Dolor lució rosas de color púrpura, alelíes cardenal, rosas blancas y bracicas blancas.

La salida volvió a ser uno de los momentos más esperados, al salir el trono desde detrás del telón de terciopelo rojo, en el Pasaje Sacristán Vicente Becerra. Al sonar los tres golpes en la Puerta del Silencio de Santa María, el telón se descorrió para dejar ver al impresionante conjunto escultórico.

El sonido de los penitentes, al arrastrar las cadenas a sus tobillos, por las calles del conjunto histórico enmudeció al público presente, como es habitual. El Silencio llevó, nuevamente, en su cortejo a penitentes, que para expiar sus pecados, también portaron cruces de madera. Hay dos tipos: los penitentes negros, que hacen referencia a los siete pecados capitales; y por otro lado, otros con túnica blanca, fajín y antifaz rojos, que no están vinculados a ningún pecado capital en concreto.

Delante de cada penitente negro, se posicionó un hermano del Silencio, con túnica y capirote blanco, que portan los banderines con las virtudes, en contraposición a cada pecado capital.

Cientos de devotos volvieron a acompañar a los Titulares del Silencio, pese a que la Estación de Penitencia arrancó a las 23:00 horas. Igualmente, destacó la afluencia de visitantes que pudieron ser testigos de esta tradición que atesora el Cristo de la Sangre, que en proyecto tiene la candelería de plata para el altar de Nuestra Señora del Mayor Dolor, que se presenta-rá en septiembre.