El pasado viernes, el auditorio de Blas Infante se convirtió, una vez más, en el lugar elegido para el pregón oficial de la Feria y Fiestas de Pedro Romero y la imposición de medallas de las Damas Goyescas. El pregón que marcó el inicio de la fiesta más popular de la Ciudad del Tajo corrió a cargo del presidente de Viticultores de Ronda, José María Losantos.
Losantos, de origen burgalés, llegó a Ronda en 1998 para crear una nueva bodega y contribuir al proyecto de recuperación del sector vitivinícola. Una iniciativa que terminó por convertirlo en un rondeño de adopción.
El bodeguero realizó un discurso «sencillo», con el que hizo un recorrido por las calles y monumentos de la ciudad, entendidos por él como «paisajes de calidez y dulzura».
De este modo, hizo referencia a la majestuosidad del Puente Nuevo, a la quietud de los patios del Palacio de Mondragón o a la santidad de los jardines de Don Juan Bosco, entre otros lugares. «Hay tanta luz que las sombras no son sombras, o al menos no son oscuras», señaló el pregonero.
«En el mes de septiembre comienzan los nervios de los viticultores por la vendimia y se ven unidos a los nervios por la llegada de la Feria y Fiestas de Pedro Romero. El trabajo se mezcla con los mil festejos de la Feria», apuntó.
Asimismo, después de los agradecimientos, en los que tuvo palabras especialmente dedicadas a su mujer, finalizó señalando que «sabéis que no he nacido en Ronda, pero aquí quiero acabar mis días».
Por otro lado, en el mismo acto tuvo lugar la imposición de medallas a las catorce Damas Goyescas y a su presidenta, las cuales tendrán la responsabilidad de representar a la mujer rondeña durante la Feria y en los eventos que se desarrollen durante el año.
Además, María Villalón puso el cierre a este evento, como ya hizo hace seis años. La cantante estuvo acompañada en el escenario por Jesús Arteaga, voz y guitarra del grupo canario «La Vieja Morla».



