La Diputación de Málaga ha financiado con cerca de 800.000 euros la mejora del acceso del Camino del Toril, una vía alternativa para desplazarse hasta Igualeja desde la carretera autonómica A-397, la que conecta Ronda con San Pedro Alcántara.

La diputada de Fomento e Infraestructuras, Nieves Atencia, ha visitado hoy, junto a la alcaldesa de Igualeja, Isabel Vázquez, la zona en la que se desarrollarán las obras, que empezarán en breve. Atencia ha explicado que se trata de una actuación integrada en el Plan Vía-ble, puesto en marcha para luchar contra el despoblamiento rural, facilitando la comunicación viaria entre pueblos y núcleos diseminados así como su acceso a vías rápidas.

En este caso, Atencia ha aseverado que se concedió una subvención de 900.000 euros al Ayuntamiento de Igualeja para que licitara las obras que, finalmente, se adjudicaron a la empresa Canteras de Almargen por 786.332,22 euros.

La diputada ha destacado que, con este proyecto y el uso del camino, se recorta en tiempo y distancia el acceso a Igualeja desde la costa. Actualmente, el recorrido a realizar entre los municipios de Igualeja y San Pedro Alcántara supone un recorrido de 43,5 kilómetros durante 55 minutos. La alternativa propuesta en el Plan Vía-ble reduce el recorrido a 36,2 kilómetros y a 43 minutos el tiempo.

Actualmente, el acceso del camino a la A-397 se efectúa de una manera que impide que los movimientos se realicen con total seguridad, impidiendo además la incorporación mediante giros a la izquierda en sentido Ronda.

Para mejorar la intersección y facilitar el uso de ese camino, se ha diseñado por parte del servicio de Vías y Obras de la Diputación de Málaga una modificación de tal manera que el camino conecte de manera perpendicular con el tronco de la carretera A-397. A su vez, para garantizar la seguridad de todas las maniobras, se han proyectado sobre el tronco de la carretera autonómica carriles centrales de espera, de aceleración y de deceleración que permitan la salida y la incorporación en condiciones que garanticen la seguridad.

El acondicionamiento de la intersección contempla, por un lado, un muro de escollera y, por otro, un muro verde ecológico con geomallas como terraplén por el discurrirá la nueva traza del camino. Posteriormente, se extenderá el paquete de firme consistente en una capa de zahorra artificial y dos capas de asfaltado y se ejecutará la señalización y los elementos de protección. Este nuevo vial proyectado contará con dos carriles de 3,5 metros de ancho y arcenes pavimentados de un metro cada uno.