Con mucha cautela los usuarios, trabajadores y religiosas del Asilo de las Hermanitas de los Pobres comienzan a recuperar cierta normalidad con la reanudación, el pasado sábado de visitas de los familiares y allegados, y ofreciendo a los casi 70 residentes la posibilidad de realizar salidas controladas.
La hermana Sor María de los Ángeles ha confirmado con satisfacción que tanto los usuarios, como las hermanas y los trabajadores del centro residencial cuentan ya con las dos dosis de la vacuna contra el coronavirus.
“Gracias a Dios estamos vacunados. Ya han empezado a venir visitas para los ancianos y se puede salir, siempre con muchas precauciones. Con mucha alegría de poder hacer un poquito la vida normal. Les deseo a todos que se cuiden para estar alerta, que no vuelva a pasar en ninguna casa, en ningún hogar”, ha manifestado Sor María de los Ángeles.
Asimismo, la religiosa ha dado a conocer que los ancianos ya hacen uso de zonas comunes como el comedor, manteniendo en todo momento el cumplimiento de medidas de prevención como la distancia interpersonal, mientras que el personal del asilo procede a la desinfección y limpieza frecuente de estos espacios.
Recordamos que aún numerosos estudios advierten de la posibilidad de que aquellas personas que se hayan vacunado, se contagien, aunque de forma asintomática en la mayoría de los casos, y tengan la capacidad de transmitir la enfermedad. Es por ello que a pesar de haber obtenido las dos dosis de la vacuna, los usuarios no deben bajar la guardia mediante el uso de mascarilla y manteniendo una distancia de seguridad.





