Manuel Baena
XXXVIII CORRIDA RONDEÑA DE REJONES. Tres cuartos de plaza en tarde calurosa. Los tres caballeros rejoneadores salieron a hombros.
Toros de José Benítez Cubero con movilidad y buen juego, siendo alguno aplaudido en el arrastre, especialmente el quinto en salir.
Rui Fernandes: Ovación y 2 orejas. Ataviado con chaquetilla negra con bordados azabaches y tricornio a la federica, con cuadra nueva, estuvo fino y elegante, sorprendiendo gratamente en comparación al recuerdo de su insulsa actuación del año pasado.
Diego Ventura: Oreja y 2 orejas. Chaqueta verde y calañés. Para el recuerdo: el toro pegado a las tablas de la puerta de arrastre y Ventura en el otro extremo del redondel yendo al galope y quiebro ceñidísimo al embestir el toro clavándole las banderillas (otros quiebros fueron con más espacio o no dieron ocasión a clavar los rehiletes). Eso, y Dólar, al que quitó el cabezal y causó la mayor exaltación del público en la tarde.
Andrés Romero, que venía convaleciente por la cogida no hace más de veinte días en El Puerto de Santa María que le causó fractura de clavícula y fuerte traumatismo pélvico: Oreja y dos orejas. Muy notable su merma física, el gran esfuerzo que realizó y el interés constante de sus compañeros de cartel que le brindaron la muerte de sus primeros toros. Con chaqueta berenjena y azabache, resaltar que el mejor rejón de muerte de la tarde fue en su sexto.
Otras incidencias: antes de iniciar la lidia del tercer toro, el presidente del festejo, D. Luis Candelas, expulsó a un espectador del tendido 2.