El recién estrenado parque canino permanecerá cerrado durante dos días de manera preventiva al haberse detectado dos orugas procesionarias muertas en el recinto, según ha explicado el delegado de Parques y Jardines, Ángel Vázquez.
La procesionaria aparece en los pinos con la llegada de la primavera. Este insecto cuenta con pelos urticantes que producen reacciones inflamatorias, estornudos y erupciones en la piel de los humanos y otros mamíferos, por lo que pueden suponer un gran peligro en caso de ser ingeridas por los perros.
Vázquez ha explicado que “antes de abrir el parque canino constatamos que no había presencia de bolsones de orugas sobre los pinos”, pero al no haberse registrado temperaturas excesivamente bajas este año “estos insectos han hecho acto de presencia mucho antes de lo esperado”.
Sin embargo, el edil ha reconocido que “me comunicaron desde la Protectora de Animales RAU que habían detectado la presencia de procesionarias y efectivamente había dos orugas muertas”. Pero además, “han aparecido un par de bolsones en pinos del exterior, que en el caso de que estén llenos de orugas podrían entrar en el parque”. Por ello, durante estos días se llevarán a cabo las acciones pertinentes para erradicarlas.
Finalmente, Ángel Vázquez ha anunciado que en agosto se colocarán trampas con feromonas para impedir la fecundación de las orugas.