Ronda se ha despertado hoy con la triste noticia del incendio en Confecciones Ordóñez, un histórico comercio de la calle Espinel con más de cuarenta años de antigüedad y que ha quedado muy dañado a consecuencia de las llamas, las altas temperaturas y el humo.
Los hechos se produjeron minutos antes de las nueve de la mañana, dándose la circunstancia de que a esa hora la ciudad se encontraba bajo un intenso aguacero que también motivó que los bomberos tuviesen que achicar agua en varias naves de la calle Guadalimar, en el polígono El Fuerte.
Cuatro dotaciones del Parque de Bomberos de Ronda han actuado durante toda la mañana en este local comercial ubicado en la calle Espinel, además de efectivos de la Policía Local y el Cuerpo Nacional de Policía. La situación trajo consigo el corte al tráfico de uno de los tramos de la calle Cruz Verde y también se acordonó el quinto tramo de Espinel, lo que provocó que cientos de curiosos se agolpasen a ambos lados para tratar de conocer el alcance de lo sucedido.
La extinción ha sido «compleja», según apuntó el Jefe del Parque de Bomberos de Ronda, Álvaro Bautista, a consecuencia de «la cantidad de ropa acumulada en el almacén, lo que provocó que tardásemos más de lo habitual, unos cuarenta minutos, en localizar el foco del incendio», argumentó Bautista, que añadió que «se han producido daños también en la estructura». La Policía Nacional investiga las causas del siniestro, que hasta el momento no han trascendido, aunque se conoce que el origen estuvo en el almacén. El resto del local también ha sufrido daños.
Las llamas y el humo provocaron el desalojo de tres viviendas colindantes. También se han producido daños en comercios como Óptica Coca, local que antiguamente formaba parte de Confecciones Ordóñez. Su responsable, Lorenzo Ruiz, explicó que «el humo ha entrado por el falso techo de escayola y ha afectado a la maquinaria del gabinete óptico».
Menos cuantiosos son los daños que ha sufrido la Pastelería Daver. Su propietario, David Verdú, señaló que «hemos tenido que tirar prácticamente todos los dulces que se encontraban en la vitrina, ya que cuando hemos abierto estaban cubiertos por una capa de ceniza». Además, una decena de locales comerciales no han podido abrir sus puertas durante la jornada matutina, ya que los trabajos de extinción se han prolongado hasta el mediodía.
Alfonso Barragán: «Es muy duro, pero resurgiremos»
Alfonso Barragán regenta junto a su esposa e hijo Confecciones Ordóñez, uno de los establecimientos más emblemáticos y con más historia de la principal calle comercial de Ronda. Fue fundado a comienzos de los setenta por Manolo Ordóñez y desde entonces no ha perdido un ápice de su esencia de negocio familiar y con arraigo en la ciudad.
«Lo que ha pasado hoy es muy duro, algo horrible. El fuego lo ha destruido todo», manifestó Alfonso visiblemente afectado tras comprobar el estado de un negocio que ha contribuido a sacar adelante con su esfuerzo y dedicación durante los últimos treinta años. «Siento cada rincón de esta tienda como mío, pero resurgiremos y la reconstruiremos desde sus cenizas», concluyó.