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Este muerto está muy vivo

Cristóbal Ojeda, antes de explicar su historia ante las cámaras de Canal Charry. // CharryTV

Dan por fallecido a un ciudadano rondeño que se percató de ello cuando fue a renovar su carné de identidad

¿Recuerdan aquella película de finales de los 80 que dirigió Ted Kotcheff? Pues más rocambolesca si cabe es la historia de Cristóbal Ojeda, un vecino del barrio de San Cristóbal que, al percatarse ayer de que su Documento Nacional de Identidad estaba próximo a caducar, se dirigió a la Comisaría de Ronda para renovarlo. "La trabajadora tecleó mi carné de identidad y dio un respingo. Señor, según nuestros archivos usted está muerto desde el 29 de enero de 2009", explica entre risas Cristóbal. 

"La sorpresa fue mayúscula. La gente que esperaba su turno empezó a reírse, pero desgraciadamente es la segunda vez que me ocurre", apunta este rondeño al que ya dieron por fallecido en 2008 tras confundir el número de su Documento Nacional de Identidad con el de su padre, que pereció en mayo de ese mismo año. 

Tras demostrar que seguía "vivito y coleando", Cristóbal volvió a la vida para las administraciones el 29 de enero de 2009. La primera vez, Cristóbal se dio cuenta de que constaba como fallecido cuando fue a votar y no pudo hacerlo. "Consulté el censo y aparecía como fallecido", explica. 

Pero aunque su existencia sea evidente, no ha sido fácil demostrárselo a las administraciones. "Me tuve que pegar toda la mañana en el INEM, Hacienda, la Seguridad Social y la Comisaría, pero ya puedo decir que he nacido tres veces", ha señalado este rondeño, que ha encajado con filosofía y buen humor un doble error poco frecuente y que le ha llevado a convertirse involuntariamente en el protagonista de esta historia.