Las escaleras, que conforman el único acceso al camarín de la Virgen de la Paz, se han desplomado. Ahora, los encargados de cuidar el santuario, las camareras y las Hermanas Esclavas no tienen posibilidad de acceder a la capilla en la que se sitúa la Virgen.
La estructura de madera que sostenía estas escaleras, que data del siglo XVI, se han apolillado con el paso del tiempo. Aunque en estos momentos, la única parte visiblemente afectada haya sido la subida, se sabe que la entrada y el camarín en sí cuentan con el mismo tipo de sostenimiento, por lo que habrá que arreglar toda la zona. En el momento del suceso, se encontraba encima de las escaleras un albañil que estaba realizando trabajos de valoración del estado de las mismas y que pudo salir ileso del accidente.
El párroco de La Paz, Francisco Sánchez, ha hecho saber que ya se ha llevado a cabo una valoración de los daños, a cargo de un arquitecto rondeño y que se ha enviado al Obispado.
Esta intervención se suma a los ya planeadas para el santuario, como son los trabajos de la cúpula del altar mayor y del camarín de la Virgen, que fueron las dos zonas que no se restauraron cuando se hizo la intervención del tejado. Además, se quiere trabajar en el retablo, que se encuentra un poco descolgado, para evitar posibles deterioros.