Se cumplieron los pronósticos en la gala de la Guía Michelín España y Portugal 2018, celebrada anoche en Tenerife. Benito Gómez y su Bardal son hoy portada en la prensa provincial por devolver a Ronda la estrella que perdió en 2010 el antiguo Tragabuches tras años de éxitos con Dani García y Sergio López a los fogones.
El de Benito Gómez y su equipo es el triunfo a la constancia, la humildad y el trabajo cuidado, en un proyecto muy personal y con una cocina directa y de bocado corto de un barcelonés de origen que se encuentra plenamente integrado en nuestra ciudad desde hace ya bastantes años.
Para los inspectores de la Guía Michelín, Bardal, que abrió sus puertas hace apenas un año y medio en la céntrica calle José Aparicio, ha sido toda una sorpresa por combinar a la perfección la gastronomía creativa con el mejor interiorismo, con sabores profundos y productos muy locales.
Gómez tiene en la actualidad 41 años y desarrolla su carrera como cocinero desde hace dos décadas tras comenzar a estudiar con 15 años en la Escuela de Hostelería de Sant Pol de Mar. Desde que tenía 19 años ha trabajado en algunas de las mejores cocinas de nuestro país como la de Jean-Luc Figueras o La Alquería, instruyéndose en las técnicas de Ferrán Adrià. Además es propietario de otro establecimiento gastronómico de referencia en Ronda: Tragatá.
 
				 
								 
															

 
								

 
								 
								 
								 
								 
								 
								
 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								 
								