Este sábado, 18 de octubre, se va a celebrar en Benaoján la XII edición de la Marcha Cueva del Gato, un evento de trail running organizado por el Ayuntamiento de la localidad en el que se darán cita alrededor de 300 deportistas.
La competición está dividida en dos pruebas: una marcha corta, de 26.5 km y un desnivel acumulado positivo de 966 metros; así como una marcha larga, de 43.5 km y un desnivel acumulado positivo 2.418 metros.
El ámbito geográfico se circunscribe a los términos municipales de Benaoján, Jimera de Líbar, Cortes de la Frontera y Montejaque, todo ello transcurriendo por las vías forestales (pistas y senderos), que determinan la Sierra de Líbar y el Parque de Grazalema a su paso por estas localidades.
La salida de ambas carreras será desde la Avenida de la Constitución, mientras que la meta estará instalada en la plaza San Marcos.
Entre los participantes se encuentran Darío Castaño y Adrián Tornay. El primero, natural de Benaoján, realizará la marcha larga mientras que el segundo, vecino de Montejaque, hará la corta. Han realizado la carrera en varias ocasiones en las diferentes distancias y conocen muy bien el recorrido.
“Hay muy pocas carreras en la zona con una distancia de 40 kilómetros. Eso requiere una preparación especial que viene muy bien como entre para una larga distancia o una ultra. Además, tiene un poco de todo, con zonas más llanas, piedra, asfalto, etc.”, explica Darío.
“Gato es una carrera espectacular. Desértica, por ejemplo, es una de las que más atraen a los corredores, pero no te vas a encontrar lo que tenemos aquí. Eso hace que a pesar de que este fin de semana coinciden varias competiciones, muchos se hayan decidido por esta. Es una carrera muy disfruta, en cualquiera de sus distancias”, añade Adrián.
En este caso, ninguno de ellos se ha marcado un objetivo porque su intención es disfrutar lo máximo posible ya que juegan en casa.
Ese también es el objetivo de Hansjörg Roller. Este deportista viene cada año desde Alemania para participar en la marcha en la categoría senior. Ha completado tres veces la prueba larga y esta será su segunda carrera en la modalidad más corta.
El participante alemán es un enamorado de nuestra sierra, además de nuestro clima, la comida y del trato de los vecinos, donde ya ha creado un núcleo de amistades.
No podemos olvidar la carrera infantil, en la que participan numerosos niños del pueblo y familiares de los participantes adultos, en un pequeño recorrido por las principales calles del pueblo.