“Actividades en Sierra de las Nieves es una empresa joven que surgió de hermanos y pareja por ese amor que tenemos por el entorno en el que vivimos y para fomentar los cuidados que nosotros realizamos”, asegura Juan Francisco Ramírez, cofundador de esta joven empresa que ofrece diferentes actividades en plena naturaleza.
Con base en el Cortijo las Navas de los Pinsapos (en el término municipal de Parauta), este ingeniero agrónomo y su pareja, Clara, ofrecen alternativas tan variadas como rutas a pie, en bicicleta o en 4×4; observaciones de aves o un aula educativa relacionada con el medio ambiente, entre otras.
“Yo soy natural de la costa de Cádiz y conocí a mi pareja en Córdoba cuando estudiábamos en la universidad. Cuando me trajo aquí por primera vez me enamoré de este lugar y decidí trasladarme aquí. Comenzamos con una asociación de conservación de los pinsapares en la que ya ofrecíamos excursiones educativas, pero decidimos crear una empresa como tal hace tan sólo un par de años”, explica.
Ambos consideran que es importante conectar con la naturaleza, por lo que todas sus actividades están relacionadas con la educación ambiental y la gestión sostenible de los recursos que ofrece la naturaleza.
La finca en cuestión se encuentra en una zona periférica de protección del Parque Nacional Sierra de las Nieves, lo que les permite continuar realizando estas labores de aprovechamiento maderero y cinegético.
“Este lugar es parte de mí. Mi padre llegó aquí a raíz de mi abuelo y conoció a mi madre en el mundo rural. Ambos empezaron un proyecto de vida partiendo de cero porque no había nada en la finca, ni luz ni agua potable, pero salieron adelante y nosotros hemos decido continuar nuestra vida en este espacio”, explica Clara Freiherr von Fürstenberg.
En estos momentos se encuentran en plena organización de una actividad que está teniendo mucho éxito, especialmente entre los amantes de los animales. Se trata de una ruta nocturna a pie hasta la Morada del Pinsapo para escuchar la ronca del gamo.
Este cérvido, característico de la Sierra de las Nieves, emite un sonido muy grave y peculiar durante la época de apareamiento, equivalente a la berrea de los ciervos, que recuerda al rugido de un león. El objetivo es que los participantes experimenten una sensación única no sólo por el sonido de los animales sino por el hecho de poder dormir en hamacas colgantes entre los árboles.
Esta actividad, que incluye un desayuno serrano, comenzará este viernes y se prolongará hasta el 9 de octubre. “Nuestra idea es continuar aquí durante mucho tiempo porque amamos lo que hacemos y queremos seguir transmitiendo este sentimiento. Además, tenemos una hija muy pequeña a la que también queremos inculcarle estos valores”, finaliza Juan Francisco.
