El importante crecimiento de contagios de coronavirus en las últimas semanas ha obligado a la Junta de Andalucía a tomar nuevas medidas de restricción que serán más duras en función del nivel de alerta en el que se encuentre cada localidad. En este sentido, toda la provincia de Málaga ha pasado este jueves al nivel 3 de alerta.
Esto supone, por ejemplo, una reducción de aforos al 50% en el interior de los establecimientos de hostelería, donde sólo estarán permitidos cuatro comensales por mesa. En el exterior, el aforo se mantiene al 100% aunque con un límite de seis personas por mesa. Además, no se servirán bebidas a nuevos clientes a partir de la medianoche en el interior de los locales ni a partir de la una en exteriores o terrazas
Una de las medidas más polémicas es la de la vuelta del toque de queda, que en esta ocasión se implantaría entre las 2.00 y las 7.00 horas en aquellos municipios que superen los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes. La propuesta ya ha sido ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Por otra parte y tras varias jornadas en aumento, el número de casos activos ha descendido en el Área Sanitaria de la Serranía, situándose en 323, en una jornada en la que no ha habido que lamentar ningún fallecido. En cuanto a la presión hospitalaria, ahora son cuatro los pacientes COVID ingresados en planta en el Hospital Comarcal de la Serranía. En Ronda, la tasa de incidencia acumulada se sitúa en 732,3 casos y en la comarca, en 672,7.



