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Katy Tienda Gourmet, un escaparate de productos locales

Cati Moreno junto a su hijo y su nuera. // CharryTV

El negocio familiar, ubicado frente a la estación de autobuses, cumplirá 45 años este próximo mes de enero

Paloma González

Hace casi 45 años, Cati Moreno y su marido José Gutiérrez dejaron La Cimada para instalarse en Ronda y abrir en enero de 1980 una pequeña tienda ubicada en el número 13 de la calle Comandante Salvador Carrasco.

“Teníamos una granja y tierras, pero llevábamos unos años muy malos. De hecho, mi marido se iba a ir a Suiza cuando mi tío nos propuso quedarnos con la pequeña tienda que tenía en Ronda. A mí me dio mucha alegría porque no quería quedarme sola con mis dos niños, que entonces tenían dos años y medio y nueve meses, así que nos vinimos todos a la ciudad”, recuerda.

Cati asegura que los primeros meses no fueron fáciles porque ninguno de los dos tenía experiencia previa: “Aquello era muy difícil porque se hacía a mano y las cuentas a lápiz. A mí siempre me habían gustado las cuentas, pero no sabía sumar grandes cantidades. Una profesora me enseñó a manejar el peso y me enseñé tan bien, que a día de hoy no necesito calculadora”.

Empezaron con muy pocos productos, como fruta o carne, pero poco a poco fueron ampliando los artículos hasta vender prácticamente de todo. “Recuerdo que la primera venta fueron 7.000 peseta, pero a final de mes hicimos una caja de 35.000 pesetas. Aquel día mi marido, que en Gloria esté, se puso contentísimo porque empezábamos a verle color y a pensar que habíamos tomado una buena decisión”.

Aquella primera tienda se encontraba frente al Cuartel de la Concepción por lo que eran muchos los militares que compraban allí. También fue testigo del Golpe de Estado en el año 1981.

“Aquel día lo vendimos todo. La gente se asustó mucho porque no sabían qué podría pasar así que todo el mundo vino a comprar y la tienda se quedó vacía. Hasta de noche estuvimos vendiendo”, señala Cati.

A mediados de la década de los 90, el matrimonio trasladó su negocio a un local que estaba disponible en la plaza Concepción García Redondo. Se trataba de un espacio mucho más amplio justo enfrente de la estación de autobuses.

“Y aquí seguimos. Dejamos el alquiler, compramos este local y ahora es mi hijo Miguel Ángel y su mujer quienes llevan la tienda. Yo estoy muy orgullosa y muy satisfecha porque mantienen muchos clientes que llevan con nosotros toda la vida y que ya forman parte de la familia”.

El relevo generacional vino acompañado de un nuevo enfoque, un cambio de imagen y la incorporación de más productos locales.

“En la Serranía de Ronda tenemos productos de una calidad superior y tenemos que ponerlos en valor. Yo soy muy fan de lo nuestro y apuesto por ello. Por eso, cuando hicimos la obra le pusimos cristalera para que fuera un gran escaparate de productos locales”, explica Miguel Ángel.

Él también ha vivido momentos complicados siendo propietario, como la época de la pandemia. No obstante, y a pesar de que son malos tiempos para el comercio local y las pequeñas tiendas de barrio, se muestra optimista de cara al futuro y con la ilusión de poder continuar muchos años más al frente de la tienda.