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Los legionarios de Ronda organizan en Koulikoro una edición simbólica de los 101KM

Efectivos de la Xª Bandera, llegando a meta acompañados por infantes de Marina del Tercio de Armada // CharryTV

Han recreado por relevos en la base Boubacar Sada Sy la prueba que debía celebrarse hoy en la Serranía, con homenaje incluido a Súper Paco

Manolo Guerrero

En circunstancias normales, en estos momentos 10.000 corredores y ciclistas estarían participando en la XXIII edición de los 101 Kilómetros de La Legión en Ronda. Una prueba que, como todos los eventos desde hace casi dos meses, deberá esperar al año que viene por la crisis sanitaria provocada por el COVID-19.

Sin embargo y pese al coronavirus, la prueba popular más importante de España sí se ha celebrado, aunque de forma simbólica y respetando todas las medidas de seguridad, muy lejos de la Serranía, en la base Boubacar Sada Sy de Koulikoro, donde continúan desplegados efectivos de la Brigada de La Legión, la mayoría pertenecientes a la Xª Bandera Millán Astray, con base en Ronda, en la misión europea EUTM-Mali XV. 

Los legionarios rondeños, bajo el mando del teniente coronel Fernando Sánchez, han querido tener un recuerdo con su tierra y con la prueba que supuso el origen de tantas otras tanto en las ciudades con unidades de La Legión, como en otros puntos del país. 

Cada participante ha realizado un kilómetro en el interior de la base, manteniendo el distanciamiento social. A más de 40 grados de temperatura y en algún caso, como el del brigada Alcón, portando un pesado traje antiexplosivos de 35 kilos, el mismo que emplea en su labor al frente de los especialistas EOD. Además, se ha colocado una imagen de Súper Paco para homenajear también a uno de los grandes símbolos de los 101 Kilómetros, tras su fallecimiento en octubre del pasado año. 

Un bonito gesto hacia nuestra tierra cuando los legionarios se encuentran en la fase final de su despliegue en el Sahel africano, a más de 2.000 kilómetros de nuestro país y participando en una misión que también ha padecido los efectos del COVID-19, ya que desde hace semanas se suspendieron las actividades de formación a los soldados de las Fuerzas Armadas Malienses (FAMa) y parte del contingente regresó a territorio nacional tras detectarse varios casos de contagio en el Cuartel General de Bamako, la capital del país.