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La Policía Local aplica seis sanciones el fin de semana por incumplimiento de medidas

De las seis multas que los agentes han impuesto el pasado fin de semana, dos se han aplicado a ciudadanos reincidentes. // Manolo Guerrero

El cuerpo, compuesto por 60 efectivos, ha levantado un total de 197 actas desde que comenzó el estado de alarma por desobediencia a las normas

María José García

La Policía Local ha impuesto un total de 197 sanciones a ciudadanos desde que comenzó el estado de alarma, y de ellas seis corresponden al fin de semana. 

De esas seis multas, todas ellas por desobediencia, dos se aplicaron a ciudadanos que habían reincidido anteriormente en el incumplimiento de las medidas, mientras que las cuatro restantes fueron sanciones a ciudadanos residentes en otros municipios que el pasado viernes 1 de mayo, día festivo, alegaron que se encontraban a Ronda para realizar compras.

“La pregunta más frecuente es si podemos ser multados, cuando la gente no debería de temer la infracción, sino el riesgo al que se expone”, manifiesta el Jefe de la Policía Local en Ronda, José Carrasco.

La apertura parcial de algunos comercios de la fase 0 vigente, así como el permiso para realizar práctica deportiva o salidas controladas no ha incrementado el número de sanciones, como afirma Carrasco. Además la delimitación de franjas por edad y horarias facilita las labores de vigilancia de los agentes.

Un total de 60 efectivos de este cuerpo velan por el cumplimiento de las medidas, con vigilancia en las calles en cinco turnos, con unos 10 agentes por turno, así como con la tramitación administrativa de sanciones.

A la hora de acudir a los comercios que ahora abren sus puertas, los agentes recomiendan asistir a los que se ubiquen cerca del domicilio, y pasar en la calle el menor tiempo posible, pero no existe un control estricto a este respecto para que los ciudadanos puedan acudir libremente a aquellos comercios que deseen.

Comienzan a aliviarse algunas medidas, como las que se refieren al número de ocupantes en los vehículos: Se permite un máximo de dos ocupantes por fila de asientos, y el uso de mascarilla es obligado si en el vehículo viaja algún miembro que no conviva o pertenezca a la propia unidad familiar. En el caso de los taxis se aplica la regla de los dos ocupantes por fila, salvo en la fila del conductor, que debe viajar solo.

En el transporte público el uso de mascarilla es obligado en todo momento, y la ocupación debe ser del 50%, con un pasajero por cada fila de tres bolillos, en el caso del autobús.