Los socios de AMARO, la Asociación de Mayores de Ronda, celebraron en la tarde de ayer en las instalaciones del Centro de Mayores su tradicional Fiesta del Abuelo y la Abuela.
El evento comenzó con una merienda y la entrega de reconocimientos a los socios de mayor antigüedad. En este caso, los galardonados fueron Manuel Ponce Mesa, socio número 333, y Margarita Esquina Niebla, socia 334.
El “Abuelo del Año” no quiso asistir al acto. Margarita, sin embargo, se mostró encantada y agradecida, aunque no se lo esperaba: “Yo creía que era algo para todas las abuelas, no sólo para mí, aunque estoy muy contenta”.
Esta abuela sólo tiene un nieto del que se siente muy orgullosa: “Está en Málaga porque acaba de aprobar las oposiciones, pero me llama todas las noches”.
El Coro de AMARO interpretó tres canciones para deleite de todos los asistentes que, en cuanto sonó la música de Wally Luján, saltaron a la pista para bailar y disfrutar de una tarde muy esperada por todos los socios, ya que la pandemia les había arrebatado muchas actividades que venían celebrando desde hacía muchos años.
“Llevo muy poco tiempo en Ronda porque emigré. Cuando enviudé, volví a la ciudad y, la verdad, es que estoy muy contenta aquí. Me han acogido muy bien y nos lo pasamos estupendamente”, asegura Joaquina, la ganadora de una cesta con productos de la zona que sortearon entre los asistentes.
Tampoco faltaron las voluntarias de AMARO para atender el servicio de barra.
