Ronda cuenta desde hace unas semanas con un nuevo establecimiento de segunda mano y antigüedades, especializado en decoración. Se llama “El Rincón Atemporal” y se encuentra en el número 52 de la calle Sevilla.

Sus propietarios son Nataly Lara y Arthur Le Rigoleur, una joven pareja que se ha trasladado de la Costa del Sol a nuestra ciudad, buscando una mejor calidad de vida para ellos y para su pequeña hija de tres años:
“Teníamos una tienda de segunda mano en San Pedro Alcántara y nos iba bien, pero la vida es muy cara, con los alquileres cada vez más altos. Un familiar que vive aquí nos sugirió trasladarnos. Ya conocíamos Ronda y nos encantó desde la primera vez que vinimos así que decidimos instalarnos y probar suerte”, explica ella.
Los dos adoran las antigüedades, especialmente Arthur. “Es mi pasión. Me gusta mucho perderme en mercadillos y encontrar artículos únicos con historia”, asegura. Es por ello que en este local se puede encontrar prácticamente de todo, de diferentes estilos y épocas.
En sus pasillos se exponen cuadros, cristalería, objetos de porcelana, cofres, máscaras, imágenes con motivos religiosos, etc. También se pueden comprar ropa y libros.
“Encontramos cosas muy interesantes a través de internet. Hay piezas increíbles que pueden tener algún desperfecto, pero no importa porque nosotros la restauramos. Mis padres se dedican al arte y la restauración y me han enseñado a valorar y reparar para que perduren en el tiempo”, añade este empresario.
Nataly le tiene un cariño especial a las figuras asiáticas. “Son las favoritas de mi madre y, de hecho, todas las que tenemos en la estantería han sido de ella”, explica. Arthur, por su parte, siendo predilección por aquellas piezas que tienen casi un siglo de historia.
Ambos destacan que, además de comprar artículos, en El Rincón Atemporal también podemos vender aquellas piezas antiguas que tengamos en casa. Ellos se encargan de estudiarlas y tasarlas para ofrecerlas posteriormente en su tienda.
“Consideramos que Ronda es una ciudad fantástica para este tipo de negocios por su propia historia, que nos tiene fascinados. Aún estamos conociendo los gustos y las preferencias de los rondeños así que poco a poco iremos ofreciendo más artículos que les puedan interesar a nuestros clientes”, apunta Nataly.
Estos empresarios señalan que, en la Costa del Sol, especialmente los turistas, solían entrar a mirar. “Aquí a la gente le cuesta más. Por eso invitamos a todo el mundo a que nos visiten y ojeen sin ningún tipo de compromiso. Incluso pueden hacernos sugerencias”, expresan.







